Durante estas últimas semanas, sois muchos los profesores y profesoras que os estáis adentrando en el mundo de la elaboración de videotutoriales, con el afán de adaptaros a la excepcional situación que estamos viviendo durante el período COVID-19.

Lo cierto es que el videotutorial constituye un recurso educativo muy útil, que en estas circunstancias nos permite lograr, además, un doble objetivo:

  • Ofrecer a nuestro alumnado un apoyo formativo a la medida y ajustado a sus necesidades. Esto es, dar las explicaciones e indicaciones necesarias a nuestro alumnado sobre tal o cual materia; facilitarle las correcciones de algún ejercicios u operación matemática; resolver dudas que hayan podido surgir, etc.
  • Hacernos presentes en las pantallas de los alumnos y alumnas que durante estas semanas permanecen confinados en sus hogares, de manera que podamos propiciar una mayor conexión con ellos/as.

Para lograr dicho propósito y obtener el resultado final esperado, es importante seguir algunas recomendaciones y adquirir algunos hábitos y pautas a lo largo de todo su proceso de elaboración.

A continuación, tratamos de resumir algunas de ellas:

PLANIFICACION

  • Planificar supone delimitar bien el tema sobre el que vas a basar tu videotutorial
  • Reflexiona sobre cuál es el verdadero objetivo de tu grabación. La conclusión que extraigas te facilitará crear un buen contenido.
  • Recuerda que el planteamiento debe ser sencillo y sobre todo práctico.
  • Es importante determinar desde un principio, si nuestra explicación parte de materia nueva, o por el contrario, aporta valor añadido a conocimientos previos adquiridos.

GUION

Ya sea por nervios o improvisación, a la hora de grabar un tutorial, podemos olvidar lo que tenemos que decir, o caer en la tendencia de extendernos demasiado en aspectos innecesarios.

Es por eso, que debemos SIEMPRE escribir un guion que nos ayude a hablar más seguros, aportando profesionalidad y lo que es más importante, credibilidad y confianza.

Si miramos tutoriales con fines pedagógicos en la red, la mayoría siguen una misma estructura:

  • Título, basado en el tema a abordar: claro y conciso.
  • Presentación de la persona que está hablando (si nuestro material va a ser de uso interno, podemos omitir este paso)
  • Objetivo: cuál va a ser la finalidad de tu explicación.
  • Desarrollo del contenido: crea una introducción, se claro y conciso, evitando expresiones ambiguas que puedan dar lugar a error. Las frases deben ser cortas, no te alargues demasiado, tu alumnado puede perder el hilo.
  • Conclusión: cierra siempre tu vídeo con una conclusión y te despides. A lo sumo, si va a haber continuidad en siguientes publicaciones, puedes realizar un breve adelanto en una frase.

Ya tenemos el guion, ¿y qué hago ahora? Buena pregunta…¡Ensaya! Las primeras veces puede que nos cueste oírnos, pero todo es cuestión de práctica.

GRABACIÓN

Grabar una explicación dará un giro atractivo a la clase, captando la atención de tus alumnos/as, y por lo general, un mejor entendimiento y asimilación de contenido.

Estas grabaciones  se denominan screencasts, dado que captan nuestra pantalla, junto con la imagen que capta la webcam, bien a la par o por separado.

Llegados a este punto, puedes elegir entre un amplio abanico de aplicaciones o extensiones, como por ejemplo Screencast-o-Matic, Screencastify, Loom, Nimbus Capture, etc.

Sea cual sea tu elección, procura hacer vídeos cortos. Algunas de las herramientas mencionadas, limitan los minutos de grabación en su versión gratuita. Esto no supone problema alguno, si necesitas extenderte más en un tema, puedes estructurar el contenido por capítulos, grabando varios vídeos que resulten consecutivos para el alumno/a.

EDICIÓN

Algunas de las aplicaciones que permiten grabar, ofrecen opciones como la de acortar vídeo, añadir imágenes, hacer transiciones, etc. Si quieres realizar una edición más compleja, existen programas específicos de edición de vídeo como WeVídeo, Filmora, Shotcut, etc.

Pero un consejo, no te excedas con los elementos gráficos en tu vídeo, sólo los que sean meramente necesarios y aporten valor añadido al contenido están viendo y escuchando.

Tal y como hemos mencionado antes, es importante terminar con una conclusión y posterior despedida. En este momento, y de manera opcional, podemos facilitarles/recordarles al menos una forma de comunicarse con nosotros (mail, EVA, plataforma, etc.), asegurándonos que puedan consultar dudas sobre el contenido visto.

PUBLICACIÓN

Terminada la grabación, revisa el vídeo y recuerda cuál era el objetivo marcado al principio. Si tienes dudas, puedes compartir con algún/a compañero/a para que te dé su feedback. La finalidad no es otra que la de detectar errores habituales como que algo no se entienda, dé lugar a confusión, nos hayamos trabado o titubeado en algún momento, etc.

Una vez tengas la versión final de tu videotutorial, es cuestión de compartirlo en el medio/s que consideres más oportuno, y con el que estarán habituados tus alumnos/as: blog, Site, Drive, Youtube, etc.

¿Empezamos?